La legitimidad del Estado primigenio vendría dada por la
existencia de un pacto consentido entre sus integrantes y no por sentimientos
de identidad. Sin embargo esta legitimidad de los nacionalismos parte de que
supone la representación política de una nacionalidad. Hablamos de pacto y de
representación, pero si seguimos a Wallerstein [1979: "El moderno sistema mundial, Vol. 2", Editorial Siglo XXI] este pacto
se refiere al que establecen las élites...
jueves, 17 de octubre de 2013
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